-
19/04/2023
Los payeses y hippies de la Eivissa de los años setenta, tras el objetivo de Josep Soler en Sa Nostra Sala
El Consell Insular de Eivissa ha presentado hoy la nueva exposición que acoge Sa Nostra Sala, Eivissa als anys setanta: pagesos i hippies, del fotógrafo catalán Josep Soler Soler. La muestra, conformada por más de 200 imágenes que el autor ha dado en el Archivo de Imagen y Sonido del Consell Insular de Eivissa, se inaugurará mañana jueves y se podrá ver hasta el 2 de junio, con horario del lunes a viernes, de 10 horas a 13:30 horas y de 17:30 a 20:30 horas.
Las fotografías que el público podrá contemplar en Sa Nostra Sala son fruto del viaje “de descubrimiento” a Ibiza de la Agrupación Fotográfica de Cataluña, a principios de los años setenta, en la que formaba parte el joven fotógrafo Josep Soler Soler, nacido el 1 de abril de 1935. Aquella expedición tuvo lugar durante los días de Semana Santa y, llegados a la isla, quedaron maravillados del entorno y de su belleza. “Soler lo tuvo claro enseguida, volvería más veces, debía conocerlo mejor. Y, dicho y hecho, volvió a Ibiza varias veces más y en diferentes épocas del año para, de esta forma, captar los distintos colores del curso del año sobre la isla”, explica la directora del Archivo de Imagen y Sonido, Lina Sansano, durante la presentación de la exposición, donde ha participado también el director insular de Cultura, Educación y Patrimonio, Miquel Costa.
El autor de estas instantáneas decidió viajar con su pequeña moto para poder recorrer los diferentes pueblos y lugares que suspiraba para conocer y poder inmortalizar con su cámara. Fruto de aquellas excursiones son las imágenes que protagonizan esta exposición, donde se pueden identificar lugares tan característicos como Dalt Vila, playas como Cala Gracioneta y la iglesia de Sant Miquel.
Los principales temas que despertaron el interés del joven fotógrafo fueron, por un lado, la isla, tanto la parte de Vila como especialmente el campo y sus gentes; y, por otro lado, aquel movimiento que llamaba tanto la atención de los jóvenes de los setenta: los hippies, con su aura de libertad y tranquilidad, huyendo de los excesos del consumismo que ya empezaba a arrasar en aquellos años, pero no decir del belicismo de algunas primeras potencias mundiales.